El mundo está lleno de libros preciosos que nadie lee. (Umberto Eco)

martes, 29 de marzo de 2011

El Aprendiz de Guerrero, Lois McMaster Bujold

Si ahora empezase hablando de un personaje enano y cabezón (en todos los sentidos de la palabra), pero que compensa todos sus problemas físicos con una inteligencia sobresaliente, y es irremediablemente el personaje más carismático de su libro, la imaginación de más de uno y de dos volaría hacia Lannisport. Pero no, en esta ocasión no es de Tyrion de quien hablo, sino del personaje que inspiró a R.R. Martin para dar vida al único Lannister por el cual, hoy por hoy (a falta de leer más de la mitad de la saga), siento algún apego.

A pesar de que el personaje de Canción de Hielo y Fuego fue creado a imagen y semejanza de Miles Vorkosigan, y los dos son tanto físicamente equiparables como igual de inteligentes, existe una diferencia fundamental entre ambos: Tyrion es previsor y calculador, tiene todo planificado desde el primer momento, y va adaptando sus planes a medida que se van presentando complicaciones. Miles es, hasta donde yo recuerdo, el personaje más impulsivo sobre el que he leído jamás, ya sea narrativa épica, fantasía, novela negra o, como en el caso que nos ocupa, ciencia-ficción (concretamente, El Aprendiz de Guerrero es un ejemplo inmejorable de Space Opera). No tiene planes preconcebidos, metas claras ni "hoja de ruta" alguna para alcanzar sus objetivos. Es más, dudo que tenga objetivos claros.

Como ejemplo de este extremo sirva el siguiente hecho: Dado que el libro me lo leí en su inglés original, tuve que preguntarle a una gran fan de la novela si me había perdido algo de la trama por no leerlo en mi lengua materna, o si realmente las decisiones tomadas por Miles (y resueltas brillantemente gracias a su intelecto) eran tan... "porque sí". Y efectivamente, la segunda opción era la adecuada. Dos semanas después, era yo quien estaba recomendando sacar el libro de la biblioteca a una amiga. La forma en que se desarrolla la historia y cómo Miles se las ingenia para ir resolviendo los acontecimientos de esa bola de nieve que, a medida que va rodando, aumenta sin control en tamaño y velocidad son simplemente fantásticos.

Se trata de una historia entretenida, que engancha sin pretender convertirse en una de esas historias con mil giros argumentales imprevistos, pero que consigue sumergirte con facilidad en su universo. Acción, personajes carismáticos, algo de humor ligero... ¿Puede haber alguien que no quiera leerselo?

1 comentarios:

  1. ¿Y yo por qué no comenté esto?

    Pues sí que tiene buena pinta, lo he apuntado a la lista, peeeeeeeeero será leído cuando baje el volumen de sagas pendientes, que no quiero que suba.

    Eres horrible, no haces más que obligarme a apuntar sagas y más sagas...

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